Entre más parsimoniosa era la lentitud con
que picaba los guineos más fácil sería, para quien lo viera en el momento, ir
entendiendo que esa es su esencia al estar en la cocina. A vista fácil se
piensa de él que acciona con desánimo. Ha de entrarse en lenta contemplación
para sentir el fino sigilo al manejar el cuchillo cogido desde el otro lado del
filo; la tierna disposición del guineo en la torpe mano izquierda que permite,
al ingresar el filo en la ya rocosa textura del plátano y al girar la hoja a manera
de palanca hacia afuera de lo penetrado, al pedazo por arrancar despedir un
crujido generado desde lo no alcanzado por el filo. La inmutable
frecuencia del crujido lidera una banda sonora que caracteriza este matutino
jueves. A esta melodía de la rutina se suma, en redoble, el golpe del pedazo de
guineo al caer en la olla, y algunas veces el reclamo proveniente de la boca perteneciente
al mismo cuerpo de la mano protagonista de la anterior acción “¡¿Y mandarinas?!”.
La mano detenida a manera inversa de un impulso no reanuda hasta que la boca
insiste “¿Y las mandarinas?”. La mano siguió y la boca volvió a actuar: “Tú
eres una uvita, ¿cierto?”.
-No. Pero en serio… ¿por qué no lleva mandarinas? ¡Le faltan le faltan!
-No. Pero en serio… ¿por qué no lleva mandarinas? ¡Le faltan le faltan!
***
Aproveche, una
oportunidad solo para algunos. Se acaba y el automóvil se va.
Es hora de ingresar la fruta pulpa al hogar. Dejemos el gas, dejemos el polvo.
Aproveche, aproveche… Los tomates de árbol para el jugo, las manzanas penosas, de color del cielo cuando no es ni atardecer ni anochecer, las uvas para las señoritas, el maracuyá pesadito y gustoso.
Es hora de ingresar la fruta pulpa al hogar. Dejemos el gas, dejemos el polvo.
Aproveche, aproveche… Los tomates de árbol para el jugo, las manzanas penosas, de color del cielo cuando no es ni atardecer ni anochecer, las uvas para las señoritas, el maracuyá pesadito y gustoso.
Estamos en
promoción. Se acaba... el automóvil se va.
Ingresará la fruta pulpa a su casa.
Ingresará la fruta pulpa a su casa.
Comentarios
Publicar un comentario